En el barrio sevillano de Triana se ubica la clínica de Dual Fisioterapia. El local, de reducidas dimensiones y un solo frente de fachada, exigía un proyecto muy compacto que resolviera los usos de manera eficaz.

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La clínica se estructura en torno a un núcleo servidor, que condensa todo el programa auxiliar, del que emergen las dos salas de tratamiento, comunicadas entre sí por una sala de espera que funciona también como espacio de recepción. Los materiales naturales como la madera o la propia vegetación aportan calidez y calidad al espacio facilitando el objetivo de Dual Fisioterapia, que era crear un entorno relajante y sosegado para los pacientes que acuden a tratamiento convirtiendo incluso la espera previa en una experiencia agradable y tranquila que prepare al paciente facilitando el trabajo posterior de fisioterapia.

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Desde la fachada unos grandes vidrios facilitan la distribución de luz del exterior por el interior del local, permitiendo además el uso de la vegetación como elemento central del proyecto. A través de la vegetación se realiza una re-interpretación de un elemento de la arquitectura tradicional sevillana como es el patio: convirtiendo la sala de espera interior en un "exterior climatizado" a través de la luz abundante y la vegetación que tanto los caracteriza.